miércoles, 28 de marzo de 2012

El dueño del fútbol.

Sables de luz chocan en chispas sonoras que brotan en el calor de verdades con sabor a mentiras, pastillas de mentas que dejan el aliento con olor a cebolla en la rendija de creencias propias o ajenas que dictan lo subjetivo de entender el juego, mismo que tras un camino de luces consigue modelos aceptados en todos lados siempre que se nade en aguas profundas, esas que semejan a pereza para la mayoría de hinchas o medios y en todo este circo, lleno de espejismos y temas importantes sin real importancia, como si de una entrega de George Lucas se tratara, el enigma entre el dueño del dulce se siembra de la misma forma que la fuerza se debatía entre los Sihts y los Jedis.

domingo, 25 de marzo de 2012

¡Noticias de último minuto!

Colores brillantes, un túnel con temperatura perfecta. Canciones alegres en paraíso de alegría; un lugar donde jamás te cansas, el amor es puro y eterno y la vida su gloria en estado infinito. Sin discriminación, sin racismo, sin violencia, sin sexismo, todos tomados de la mano, es armonía, comiendo lo que les plazca sin sufrir daño alguno, sin engordar al bailar sobre las tumbas de millones de enfermedades siempre con la calidez de una almohada que olvidó a la religión. 

viernes, 16 de marzo de 2012

El pastelero


Me sigue sin quedar claro el génesis del término, aunque me consta que su origen dista de rondós nacionales; ironía por demás.
                
El concepto se me hace turbio, ha ruido de metro, de avión despegando o de carro en autopista; mientras su contorno lo dibujan en garabatos solo entendibles para aquel que lanza el supuesto insulto….

sábado, 3 de marzo de 2012

El aborto del enganche.

Sí, sí… voces mundiales altas en pro y en contra tras un debate añejo que deja estelas con olores a creencias o experiencias personales; y puede nacer un feto, promete ser un humano si la idiosincrasia materna lo permite, pero el padre, la historia, la familia de ambos… oh, que desdicha, parece ser un bebé indeseado, ¿Por qué abortarlo?, pobre, él solo quiere jugar al fútbol.