sábado, 26 de noviembre de 2011

Admiración + Incomprensión = Juan Arango


Cuadros de chocolate en el abdomen y el mejor bronceado. Sonrisa atrapa novias en un rostro de revista. Cuerpo musculado, siempre vestido a la moda, y un canapé para la prensa en cada conferencia… Un crack de marketing, dueño de la prensa rosa, envidia de las revistas de economía… “Me pitan por ser guapo y rico”, decía Cr7 tras salir empapado de insultos en algún terreno de juego, rutina por demás; al margen, un gran jugador, producto con valor añadido… y si falla una jugada, una pose para la cámara; ese el crack 3.0 del marketing actual.               

martes, 22 de noviembre de 2011

Calma.

El cielo es color Vinotinto, 30 nubes enmarcan caras conocidas y cuando cae la noche, las brillantes estrellas dibujan el rostro de Cesar Farías, con una luna o un sol, según el momento del día, que engloba su cuerpo de trabajo, mientras que una voz de autoridad, exclama en la distancia: “Vinotinto somos todos”.
                
Se hace ahora tan lejanas esas primeras páginas en blanco y negro, con goleadas de 11-0, el polvo cubre las fotos y una sonrisa dibujan nuestros rostros cuando tocamos las fotográficas actuales, en un álbum que aún tiene frescos recuerdos de la era de Richard Páez.
               

martes, 15 de noviembre de 2011

Sin lluvia no hay dramatismo. Venezuela 1-0 Bolivia

    Que las despedidas son crueles, es algo discutible. Gotas de agua besaban con pasión el suelo verde cuando una brisa helada corría por todo el estadio mientras una ola subía y bajaba con saltos coordinados al ritmo de un himno de guerra; sin embargo, todo era sudor, calor y suspenso, contraste entre el clima externo e interno. El sello de un teatro que despidió de una forma no merecida a un arquetipo del crecimiento de Venezuela tanto en fútbol como en país, el Doctor Richard Páez; aquella noche terminó 5-3 sobre el mismo rival, con un Ricardo David cubierto de injusticias, y una peste popular bajando desde la tribuna. Hoy la historia, acabó igual con victoria, pero con un perfume representativo a toda nuestra frontera, empacado en ilusión, con sello de satisfacción, se vende, el perfume: Vinotinto, y es que… “Vinotinto Somos todos”
  1. La perita era verde y amarga. ¿Quién dijo que Bolivia sería dulce? El 90% del partido se dedicaron a esperar en zona2. Les dio resultado, rompieron al equipo Vinotinto en 3 pedazos, tapaban las salidas y transformaban, rápidamente, jugadas defensivas en ofensivas.
  2. Julio Álvarez, a mi gusto, se encontró incomodo como volante central-mixto. En exceso vertical, de poca visión periférica, carente de pausa y dominio de los tiempos, sin conocimientos de cubrir marcas en zona2 y 1 del campo.

viernes, 11 de noviembre de 2011

Una montaña rusa: Colombia 1-1 Venezuela.

  1.    Todo el partido estuvo bajo el manto del agua. El terreno de juego, maltrecho, ejerció de defensa y atacante contrario para ambos equipos.
  2. Picos y momentos: Ambos conjuntos rozaron el extremismo en su propuesta, por momentos muy peligrosos y por otros pasando exceso de peligro.

martes, 8 de noviembre de 2011

¿De quién eres hincha?


El color de la franela que más te gusta, quizás, con el bordado de color clásico, de ese jugador que más te exalta. Tu piel es la playera, entonces son hermanos de raza, todos los que una similar lleven puesta. El teatro, verdoso, astas blancas en los extremos, y un balón de tono variante según el sponsor o el periodo del año. Se cuelan en tus ojos rostros conocidos, algunos solo de vista, otros nunca antes observados y ves como sube y baja una marea de ese color que tanto te identifica… Mientras, ese sonido, ese canto, ese himno de guerra, entra por el orificio de tus oídos, escala por tu cuello, se instala en tu cabeza y baja, por toda la humedad de tu cuerpo… en forma de impulsos de motivacionales… Estas en un estadio de fútbol.
Y el alcanzar el orgasmo mediante un grito de “gooool” hará que te hagas llamar hincha. Pero… ¿De quién?

martes, 1 de noviembre de 2011

Relatos nunca televisados.


    
Los pinceles nunca han pintado estos cuadros. No hay voz afanada en los micrófonos, que emita melodías sobre héroes de estos relatos, o guitarra que acomparse el ritmo agitado, veloz y fugaz, de una época en demasía linda. El cine, se hace esquivo a sus ideas, y las palabras, jamás forjaron sus letras para crear épicos escritos o libros alusivos a lo nunca visto. Solo quizás, en algún momento, de la mano de la hipérbole, llegaron a rozar la calidez de este tema, cuando desde Asía, nos llegó ese rostro del “Capitan Tsubaca”, que aún reposa en la memoria de toda mi generación, por efectos de la traducción, como “Súper Campeones”.